¿AMOR O DESEO? CAP. 14

Clara esperaba ansiosa a Javier, de esos estúpidos análisis dependía su estancia en aquel hospital. No lo soportaba más, ella se encontraba bien, sí, es cierto, se mareaba a veces, pero ese mismo reposo lo podría hacer perfectamente en casa. Pero lo que más le importaba era que en casa estaría cerca de Fran. Quería tenerle cerca, su timidez le devolvía a la niñez, le parecía tan inocente que a su lado entraba en una especie de trance, su cuerpo se relajaba automáticamente.

Por otra parte Fran se arrepentía de haber perdido una oportunidad clarísima de declararle su amor a Clara. Clara le dijo que sentía algo especial por él, ¿Por qué no reaccionó?  Fue un autentico gilipollas. Ya sabe que ella no lo rechazaría, pero… ¿Por qué seguía teniendo miedo?

Javier repasa los informes de los pacientes en su consulta.

-No puede ser… ¡Joder! Clara se va hoy seguro… su análisis está bien, y con estos resultados no puedo dejarla aquí  más tiempo.

Sí, Clara no tendría que haber estado en aquel hospital, Javier al verla se enamoró de su belleza y quiso tenerla cerca, así que exageró un poco el informe médico para poder conocerla. Pero su mentira no podía ya tenerse en pié.

Cris observa a Clara.

-Clar…

-Dime Cris.

Clara la mira y esboza una dulce sonrisa. Quiere a esa chica, es pura sinceridad.

-Si hoy te vas… ¿Te olvidarás de mí o vendrás a verme?

-Pues claro que voy a venir a verte, es más cuando te den el alta quiero que vengas a mi casa unos días.

-¿De verdad?

-Yo no miento.

Cris idolatraba a Clara, solo se conocían de pocos días, pero no podía negar que la admiraba.

En ese momento entra una enfermera.

-Señorita Clara, puede recoger sus cosas, el doctor Javier pasará dentro de poco y le entregará el alta hospitalaria.

-¿En ese caso me voy antes del medio día?

-Se supone que sí.

-Gracias.

La  enfermera sale de la habitación y Cris no puede evitar su tristeza.

-Eeeeyyy, no estés triste.

-Sin ti me voy a aburrir mucho aquí.

-Te operan la semana que viene, si todo sale bien solo estarás aquí un par de semanas más, y yo voy a venir siempre que pueda a estar contigo, ánimo.

-Quiero salir ya de aquí, necesito ver a mi príncipe.

-No te preocupes, ya verás como pronto podrás tenerlo cerca.

Clara entra en el baño para recoger sus cosas, aunque no fuesen muchas, solo tenía varias mudas de ropa interior que le había comprado la madre de Cris, un par de pijamas y su cepillo de dientes. Al salir del baño…

-¿Qué hacéis aquí?

-¡Mi amor! Casi me quedo muerta cuando aquí este pedazo de bombón que tienes de vecino apareció por la oficina con tu baja y nos contó lo sucedido

-Dani, tampoco es para tanto, estoy bien.

Clara mira a Fran, hay algo distinto en su mirada. Es más intensa, más cautivadora. Si él se lo propusiese podría desnudarla con esa mirada. Ese pensamiento hace que Clara se estremezca.

-¿Cómo te encuentras?

-Bien, hoy me dan el alta, pero no teníais que haber venido, estoy bien.

Clara observa que Fran tiene algo entre las manos. ¡Es su álbum!

-Toma, te lo dejaste en mi casa, te lo he traído porque creí que el fin de semana lo pasarías aquí.

-Gracias. Me he acordado de él.

-Clar… ¿Me dejas verlo?

-Claro, toma, pero no te rías de mí.

-No, tranquila.

Cris lo ojea examinando minuciosamente cada foto. Hay una que nada más verla se convierte en su favorita, esa cara de “patito” de Clara le arranca una carcajada.

-¡Te dije que no te rieras de mí!

-Y no me rio, me parto.

Clara le lanza miradas odio a Cris y ésta le saca la lengua  haciéndole burla.

Javier  llega a la habitación con el alta.

-Pero bueno, ¿Qué pasa aquí? ¿Se reparten caramelos o qué?

-No, hemos venido a visitar a Clara, creo que no está prohibido ¿no?-Fran miraba con odio a Javier.

La tensión era evidente. Un abrumador silencio asolaba la habitación.

Los ojos de Fran buscaban con deseo la mirada de Clara. Ahí estaban, sus ojos verdes se encontraron con aquellos preciosos ojos castaños que le miraban de forma especial.

Por unos momentos sintieron que no había nadie más, solo estaban ellos en aquella habitación. Se sentían atraídos mutuamente. Sus labios gritaban en silencio que querían besarse. Sus cuerpos deseaban ser uno solo. Querían unirse y formar una sola persona, sin tener que separarse jamás. Sentían sus corazones latiendo a toda velocidad. Era algo extraño, extraño pero al mismo tiempo mágico.

Javier se percató de la situación, y no podía permitir lo que estaba sucediendo.

-Bueno  Clara, te recuerdo que tenemos una cena pendiente, ¿Te viene bien mañana?

Fran y Clara bajan de la nube.

-¿Eh? Sí, claro mañana.

En ese momento Fran se siente como si un  jarro de agua fría hubiese caído por encima. Dani se da cuenta de cómo le había sentado la noticia a Fran e intenta romper el hielo.

-Eso amores, mañana cenas con él, pero hoy nos vamos a celebrar que te encuentras bien ¿O.K.?

-Eso seguro Dani.

-Perfecto, ¿Fran te vienes verdad?

-Sí.

-Yo no sé si podré, pero haré lo posible.

-Lo siento doctor, pero no contaba con usted, es algo nuestro, solo Fran, Clara y yo.

-Am bien, me parece…-<<una mierda>> pensó-me parece lógico.

Finalmente Javier abandona la habitación y Dani y Fran bajan a la cafetería mientras que Clara termina de preparar sus cosas.

Clara observa que Cris está rara, quizás triste, afligida, desconsolada.

-Clar, ¿Me das tu número de móvil?

Clara lo anota en un papel y se lo da con una sonrisa.

-No me olvidaré de ti.

La madre de Cris acaba de llegar.

-Vaya Clara, parece que te vas.

-Pues sí, quería hacerle una pregunta…

-Dime pues.

-Verá… estaba pensando en quedarme mañana por la noche con Cris, sé que le viene bien dormir en su cama y no en ese incómodo sillón, si usted quiere… claro.

-A mí no me importa pero… si te vas hoy…

-No importa, vendré mañana para quedarme con ella.

-Está bien, si insistes.

La mujer entra en el baño y las chicas se ponen a cuchichear.

-¡¡Pero si mañana has quedado con el doctor macizo!!

-Déjalo en mis manos y no le cuentes nada a tu madre, ya te contaré. Ahora me voy, te quiero pequeña.

-Yo también te quiero feofila.

-¡¡Oye que yo no te he insultado!!

-Pequeña es sinónimo de enana, o de niña chica, a efectos es lo mismo que un insulto para mí,-Cris le hace burla.

Y tras un fuerte abrazo y un gran beso en la mejilla Clara sale de la habitación. Dani y Fran la esperan en la cafetería para llevarla a casa, por fin en su casa.

-¿Preparada para volver al mundo?

-¿Pero había salido de él?

-Seguro que no sabes lo último.

-¿Ha pasado algo Dani?

-Raúl.

A Clara se le remueve el estómago con solo oír ese nombre.

-¿Qué pasa con él?

-Pues que tras su despido no ha podido seguir pagando el costoso alquiler de su ático y está literalmente en la calle, se pasa el día borracho. Está muy cambiado, no parece él.

-Si yo te contara…

-¿Qué?

-No, nada, cosas mías.

Tras unos diez minutos en coche llegan al bloque de pisos donde viven Clara y Fran.

Clara sienta algo extraño, es como si algo malo fuese a pasar. No dice nada, solo sube las escaleras. Su puerta está abierta. Comienza lo extraño.

-Esta mañana estaba cerrada.

-Fran, ¿Quién ha entrado en mi casa?

-Nadie que yo sepa.

Fran empuja la puerta, parece que no hay nadie, todo está revuelto, la puerta visiblemente forzada.

-Dios mío, ¿Por qué me pasa esto a mí?